Isla de Menorca

Menorca es una isla paradisiaca: agua cristalina, acantilados con encantadores restaurantes, fácil de recorrer y comida mediterránea. Para disfrutar plenamente de la isla balear es ideal ir en verano, cuando la temperatura es magnífica para pasarse el día en shorts de playa en playa. Por otro lado Menorca es conocida por su riqueza en runas prehistóricas. La isla alberga la cultura Talayótica, nombre que procede de talayots, torres de vigilancia. Visitar los restos prehistóricos es impresionante.

Por lo que hace los hostales y hoteles hay miles de ofertas que os ayudarán a escoger lo que os conviene más. Mi amiga y yo no alojamos en un tal ‘’Confortel Anabel’’, se trataban de pequeños apartamientos con su salita con cocina, baño y habitación a precio muy barato, lo recomiendo. El hotel estaba muy cerca de una de las calas más hermosas de la isla, Cala Galdana.

Cala Galdana

Es una de las calas más extensas de Menorca y de las más visitadas. Es ideal para hacer actividades como alquilar barcas de pedales, barcas con motor o cayac. En otras calas más pequeñas no encontrareis estos servicios y vale la pena alejarse de la orilla y disfrutar del vaivén del agua y ver a través de su transparencia la fauna marina. En esta cala también hay bares y chiringuitos ara ir a tomar algo. Hay también un restaurante a lo alto del acantilado donde se puede disfrutar de las vistas tomando algo en la terraza. ¡Es una verdadera maravilla!

Cala Macarella

Es divertido hacer una pequeña excursión, y más aún si el camino lleva a una pequeña cala de aguas claras y menos visitada. Esta es la cala Macarella, que se encuentra a apenas media hora de cala Galdana caminando por un camino de tierra. Esta cala no dispone de tantos chiringuitos ero quizás es por esto que uno se siente más relajado.

La isla está formada por dos ciudades importantes, Ciutadella y Maó.

Maó

Es la capital de Menorca, su puerto es uno de los mejores puertos naturales del mundo. Es precioso caminar por el puerto y pasear por el centro de la ciudad. Lo más típico en cuanto a la gastronomía de Maó es su queso, algo que se debe probar y si se puede comprarlo para que los familiares y amigos lo prueben, es una verdadera delicia. En verano la ciudad se anima mucho porque hay la Semana internacional de la Ópera, las calles se llenan de música veraniega. También es muy recomendable ir a tomar algo o salir de fiesta en la capital ya que es donde hay más ambiente. Hay varios sitios para visitar en Maó, lo más recomendables son:

La Fortaleza de la Mola

Se trata de una fortaleza militar que tenía como objetivo defender la isla. La fortaleza nunca ha sido atacada y su estado de conservación actual es excelente. Es el perfecto ejemplo de arquitectura militar con defensa terrestre y marina del siglo XIX.

Museo de Menorca

Este museo alberga los abundantes objetos del periodo prehistórico que hasta ahora se han ido encontrando en la isla.

Iglesia de Santa María

Construida en el siglo XIX, se encuentra en medio de una pequeña plaza. Vale la pena por lo menos pasar por delante y observar su construcción.

Ciutadella

Ciutadella es algo más pequeña que Maó. El casco histórico es algo hermoso, pasear entre sus calles encanta y es muy relajante tomar algo en una pequeña terraza disfrutando de la brisa mediterránea.

Plaza del Borne

Es la principal plaza de la ciudad se encuentra en la zona del puerto, es bastante espaciada, lo que más destaca es el obelisco situado en medio. En la misma plaza se encuentra el ayuntamiento y un castillo musulmán. Este conjunto hace que la plaza sea especial. Cerca de la plaza hay un mirador, encima de las murallas del siglo XVII donde se observa el muerto y la grandiosidad del mar mediterráneo.

El Puerto de Ciudadela

Es incluso más emblemático que el puerto de maó, es precioso. Hay que darse el lujo de comer o cenar en uno de los restaurantes cercanos, toda una experiencia.

Castillo de San Nicolás

La entrada es gratuita, es uno de los sitios que vale más la pena visitar. Es un monumento de carácter militar de la que un día fue la capital de Menorca. De todas las torres costeras el Castillo de Sant Nicolau es la que tiene una arquitectura más elegante.

Fornells

Es un pequeño pueblo de pescadores situado al norte de la isla. Tiene un verdadero encanto, con sus casas pintadas de blanco y su puerto particular. Si se tiene el tiempo de ir a este pequeño pueblo es recomendable visitar la Torre de Fornells, desde donde se disfrutan de unas vistas espléndidas. La gastronomía menorquina es muy reconocida, y en este pueblo se hace la mejor Caldereta de Langosta, un plato muy típico de la isla.

Ara salir a tomar algo, a comer o de fiesta

La cova d’en Xeroi

Es el sitio más impresionante para ir a tomar algo a comer a cenar o de fiesta por la noche. Se trata de una cueva reconvertida en un bar, situada en lo más alto de un acantilado al sur de la isla, en Cala Porter. Las vistas son magníficas, el Mediterraneo yace bajo tus pies y se puede disfrutar de la brisa mediterránea. Es un sitio para dejar las preocupaciones atrás. El local tiene varias terrazas-mirador. Por la noche éste se convierte en un sitio ideal para salir a mover el esqueleto.

No es podéis ir sin unas avarcas de Menorca, son esas típicas sandalias bajas y cómodas, toda una tradición en la isla. También robar la sobrasada y llevar un poco de vuelta a casa es indispensable, su sabor no se compara con cualquier sobrasada, vale mucho la pena. Son típicas también las ensaimadas, tanto en Menorca como en Mallorca, se trata del dulce más típico de la isla de Menorca.